El 12 de diciembre se llevó a cabo el torneo de fin de año de la sala Flamberge. Más de dieciséis tiradores y los maestros Sergio Bernabeu y José Domínguez hicieron posible una vez más que la esgrima sea motivo de alegría y festejo. Como todos los que conformamos este gran equipo sabemos, una sala no es una dirección postal particular o las paredes de un edificio, sino un vínculo entre las personas que la constituyen. Y en Flamberge sentimos orgullo de lo que construimos todos estos años.
El torneo del miércoles terminó con Agustín Hartridge como ganador de la copa.
Aunque todos ganamos.
¡Felices fiestas!